WASHINGTON./
Un tornado mató al menos a tres personas en el estado de Carolina del Norte, según informaron el martes las autoridades, mientras que en el resto de Estados Unidos continúa una ola de frío polar.
El tornado atravesó el sur del estado a última hora del lunes, afectando especialmente a dos comunidades costeras del condado de Brunswick.
«En este momento, hay tres víctimas mortales confirmadas y 10 heridos», dijeron los servicios de emergencia del condado de Brunswick en un comunicado.
«Se estima que al menos 50 viviendas se vieron afectadas en el incidente y varias líneas eléctricas resultaron dañadas, provocando cortes de luz».
Las fotos y los videos difundidos por los medios de comunicación mostraban árboles derribados, casas aplastadas y automóviles destrozados.
El comisario John Ingram dijo en una rueda de prensa que «habrá un largo proceso de recuperación».
Esto es algo que no he visto nunca», dijo, citado por los medios de comunicación estadounidenses.
Gran parte del país seguía amenazado por una histórica ola de frío alimentada por el gélido aire del Ártico que ha provocado temperaturas bajas récord.
El Servicio Meteorológico de Estados Unidos (NWS) dijo que una nueva tormenta de invierno estaba surgiendo en el área de las Llanuras del Sur, que incluye partes de Texas, Oklahoma y Kansas.
El NWS describió las condiciones como un «área extensa y sin precedentes de condiciones invernales peligrosas» que marcará mínimos históricos, con más de 150 millones de estadounidenses bajo algún tipo de alerta de clima invernal.
Estas condiciones han causado la muerte de al menos 12 personas y han afectado especialmente a regiones no acostumbradas a la nieve y el aguanieve.