Cinthya Trinidad
Huayacocotla, Ver.- El delegado de la Secretaría del Bienestar en Veracruz, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, aseveró que los ciudadanos que no hayan sido censados deberán esperar a que se evalúe su situación por parte de Presidencia y esperar a ser notificados para conocer qué pasará con ellos.
En entrevista efectuada no descartó que exista legitimidad en la petición de algunos casos, pero puntualizó que no habrá más censos, por lo que se debe evaluar y enviar a nivel nacional para que ellos determinen sí pueden dar el apoyo económico o no.
«Se hace un diagnóstico, notificamos a nivel nacional y ya, el presidente es el que decide porque es quien preside el comité de Protección Civil. No es un tema mio, es un tema nacional. Hay rutas, padrones, se evalúa y es el área nacional, quien nos mandata a nosotros».
Aunque, en este sitio hubo protestas por quienes dijeron, a pesar de ser dañados por el huracán no fueron censados, recordó que muchos de estos grupos son simpatizantes de políticos y «movidos» en ocasiones por otros intereses.
«En el caso de Poza Rica fue una excandidata a alcaldesa, líderes que están tres o cuatro meses haciendo plantones a ver qué pescan; el caso de la Antorcha Mundial, vinculada al color amarillo, al color guinda; alcaldes, diputados locales», añadió.
Sobre las quejas y manifestaciones de ciudadanos, quienes afirmaron que los Servidores de la Nación no hicieron un buen trabajo, descartó que hasta el momento no tienen ninguna queja formal.
«Para tener, es mejor documentarlos. Si tienen algún caso en concreto denlo a conocer (…) es el derecho, estamos en un país libre. La gente puede opinar, puede decir lo que guste, pero tienen que documentar».
Precisó que esta forma de trabajar directamente con la gente, como lo dijo el Presidente, generó un desplazamiento de personas que se decían líderes y que se aprovechaban de la situación, acostumbrados al «viejo régimen».
Aseveró que el censo se realiza bajo un sistema que incluye nombre, dirección, número de teléfono; que está verificado y es cuidado para que nadie «le meta mano», por lo que si alguien llegara a intentar modificarlo y «le mete la mano, le pica el gusano».
«Eran de chile, de dulce y manteca. De los que simpatizaban con el viejo régimen y de los que actúan inclusive con los colores de la Transformación, pero a la antigüita. Entonces eso no se permite ya», finalizó.