SANTIAGO./
Chile inició este sábado la primera jornada de una mega elección, considerada la más importante en democracia, en la que se elegirán las 155 personas que redactarán una nueva Constitución para sustituir a la actual, heredada de la dictadura de Augusto Pinochet.
Con todas las medidas sanitarias que impone la situación de pandemia, los centros de votación abrieron a las 08H00 y permanecerán abiertos hasta las 18H00 (12H00 y 22H00 GMT), para que mas de 14 millones de chilenos acudan de manera voluntaria este sábado y domingo.
Que hoy se escuche fuerte la voz de la gente en esta elección histórica, en que juntos elegiremos Convencionales, Gobernadores, Alcaldes y Concejales. De todos depende que las #Elecciones2021CL sean participativas y seguras», dijo el presidente chileno, el conservador Sebastián Piñera, a través de su cuenta de Twitter antes de acudir a votar.
En los primeros minutos de votación los locales electorales no tuvieron demasiada afluencia de personas. Durante la noche, las urnas serán resguardadas en los locales electorales y custodiadas por la Policía y Fuerzas Armadas.
De esta manera Chile comienza un inédito proceso constituyente que durará hasta el próximo año.
La nueva Constitución debe estar terminada en un plazo de nueve meses, prorrogable una sola vez por tres meses más, y en 2022 deberá ser aprobada o rechazada en un referéndum con voto obligatorio.
Elección post plebiscito
Esta elección es el resultado del plebiscito del 25 de octubre de 2020, cuando casi el 80% de los electores aprobó cambiar la Constitución heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) a través de una Convención Constitucional integrada sólo por miembros electos por voto popular.
La votación busca canalizar la rabia y frustración de una sociedad fracturada y que ve en la antigua Carta Magna la base que beneficia a una élite económica y política con un Estado débil en educación, salud y vivienda.
Chile se juega la posibilidad de hacer la segunda transición (política), que ha demorado tres décadas, por una tendencia muy fuerte al statu quo del sistema de partidos», comentó Marcelo Mella, politólogo de la Universidad de Santiago.
Este proceso con mil 373 candidatos marcará, además, la primera vez en el mundo en que una Constitución se escriba por constituyentes elegidos de forma paritaria, en igual número de hombres y mujeres, y también hará historia al reservar 17 escaños para los 10 pueblos originarios del país.
Cada elector votará por cuatro cargos: un constituyente, un alcalde, un concejal y por primera vez los chilenos elegirán gobernador regional, otra señal de que se busca una sociedad más participativa en uno de los pocos países de la OCDE que no elegía autoridades regionales.
Una oportunidad
Chile llega a esta mega elección en un contexto de optimismo por el auge en el precio del cobre, principal exportación chilena.
El país cuenta con la mayor renta per cápita de América Latina y es el tercero con más multimillonarios en Latinoamérica, aunque también uno de los más desiguales.
En una sociedad donde la clase trabajadora e incluso la media-alta viven con un gran nivel de endeudamiento, hay una baja satisfacción con la calidad de vida, según una encuesta de la consultora Cadem.
La pandemia ha golpeado duro con más de 1.2 millones de contagiados y casi 30 mil fallecidos por covid-19.
Sin embargo, hoy se experimenta una baja progresiva de contagios, muertes y ocupación de hospitales, y más del 48.5% de la población objetivo (de 15.2 millones de habitantes) cuenta con las dos dosis de vacunas.
Chile se juega una oportunidad para institucionalizar las demandas que surgen del estallido (social) como las que aparecen con fuerza a propósito de los costos de la crisis sanitaria», agrega Mella.
En este contexto de frustración está también en juego «la capacidad del sistema de partidos de garantizar la gobernabilidad en un contexto de cambios».
Si no lo logra, está el campo servido para que se puedan consolidar alternativas abiertamente populistas, añadió Mella.
Pronóstico reservado
Sin encuesta y restricciones para las campañas electorales por la pandemia, «existen bastante interrogantes sobre el resultado (…) No sabemos a ciencia cierta cuánta gente votará», explicó Claudio Fuentes, académico de la escuela de Ciencias Políticas de la Universidad Diego Portales.
Para Gonzalo Müller, profesor de la facultad de gobierno de la Universidad de Desarrollo, «el voto moderado será mayoritario» frente a las opciones más radicales.
Las coaliciones que ofrecen gobernabilidad van a capturar gran parte de la votación, beneficiando con un segundo aire a la centro-izquierda y a la coalición del gobierno del conservador Sebastián Piñera, dijo.
Chile es un país de clase media mayoritariamente y eso habla de un cierto grado de moderación. Se quieren cambios y que esos cambios se implementen rápidamente, pero que se hagan en orden y paz», agregó Müller.