Javier Laertes/
El Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), en Veracruz considera que el gasto en partidos políticos es excesivo por lo que pugnará nuevamente porque este se recorte, adelantó el aspirante a la dirigencia estatal de este organismo Esteban Ramírez Zepeta.
En ese tenor, adelantó que este instituto político continuará insistiendo en una reforma constitucional que reduzca en un 50 por ciento el financiamiento público a los partidos políticos.
“Nosotros, Morena vamos de nuevo a luchar, a impulsar para que se regrese esa reforma electoral donde se le quite el 50 por ciento a las prerrogativas de los partidos, nosotros vamos a impulsar a que eso se realice (…) independientemente de lo que esos partidos políticos hayan logrado”, señaló.
Afirmó que su partido, como gobernante y líder de la cuarta transformación, está buscando que el dinero que se destina a las fuerzas políticas, mejor se redireccione en beneficio a la población de Veracruz y no en campañas políticas.
“Ya basta de que el presupuesto público se vaya en los privilegios de los partidos y políticos corruptos, ya basta de que se gaste el dinero público en campañas tan caras”, apuntó.
Apenas el pasado 23 de noviembre, los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), invalidaron la reforma electoral publicada mediante el decreto 576 en la Gaceta Oficial del Estado, con la cual se había reducido a la mitad el financiamiento público a los partidos nacionales con registro ante el OPLE.
Por lo anterior, Ramírez Zepeta cuestionó que los magistrados no hayan analizado a fondo el propósito de estos cambios y sólo se limitaron a considerar que como no se consultó a los pueblos indígenas y afrodescendientes sobre el tema, era motivo suficiente para invalidarla.
Si bien reconoció, que por el momento no es posible llevar a cabo cambios fundamentales en la Constitución de Veracruz, ni al Código Electoral del Estado por estar en curso el proceso comicial 2020-2021, insistió en la necesidad de quitar estos recursos a las organizaciones políticas y destinarlos a otros sectores como salud, educación o desarrollo social.
“Era un acto donde se ahorraban casi 400 millones de pesos, recursos que se podría ocupar al sector salud y el sector educativo. Tan sólo en el sector salud se hubieran hecho 84 centros de salud totalmente equipados y once hospitales con 30 camas; casi 30 mil cuartos dormitorios, por parte de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) o más de 800 aulas escolares”, finalizó.
