Equipos de rescate de Estados Unidos y Canadá intensifican sus esfuerzos para encontrar el submarino ‘Titan’ con cinco personas a bordo que desapareció en el océano Atlántico mientras se dirigía a explorar los restos del «Titanic». El sumergible, operado por OceanGate Expeditions, comenzó su descenso el domingo por la mañana y perdió contacto con la superficie menos de dos horas después, según las autoridades.
Entre las personas a bordo se encontraba el millonario y aviador británico Hamish Harding, presidente de la compañía de jets privados Action Aviation. El magnate, de 58 años, expresó en Instagram el domingo su orgullo por participar en la expedición. El empresario paquistaní Shahzada Dawood, vicepresidente del conglomerado Engro, y su hijo Suleman también estaban a bordo, según un comunicado de la familia.
«Por el momento, hemos perdido contacto con el sumergible y la información disponible es limitada», afirmó la familia, agradeciendo la implicación de colegas y amigos.
La expedición también incluía al especialista francés en el «Titanic», el oceanógrafo Paul-Henry Nargeolet, según el mensaje de Harding. La Guardia Costera estadounidense reconoció que las operaciones de búsqueda eran complicadas.
«Es una región remota y es complicado realizar búsquedas en una zona así», dijo el contralmirante John Mauger a los reporteros en Boston (noreste), donde supervisa la operación. «Estamos trabajando muy duro» para encontrarlo, aseguró.
Las búsquedas, tanto en la superficie como bajo el agua, deben abarcar una región aproximada de mil 450 km al este del cabo Cod, a una profundidad de alrededor de 4 mil metros. El tiempo es un factor crítico. La embarcación tiene reservas de oxígeno para un máximo de 96 horas para cinco personas, y Mauger estimó el lunes por la tarde que aún contaban con 70 horas o más.
Las búsquedas aéreas, que no arrojaron resultados durante todo el día del lunes, fueron suspendidas durante la noche, según tuiteó la Guardia Costera estadounidense hacia las 21:00 (01:00 GMT del martes). El buque «Polar Prince», desde el cual se lanzó el sumergible el domingo, y una unidad de la Guardia Nacional continuaron rastreando la zona durante la noche.
«El sumergible fue lanzado con éxito y Hamish está buceando actualmente», tuiteó el domingo la empresa Action Aviation, con sede en Dubái, precisando que la misión había comenzado «esa mañana a las 4:00».
«La tripulación del sumergible está compuesta por varios exploradores legendarios, algunos de los cuales han realizado más de 30 inmersiones en el RMS Titanic desde la década de 1980», afirmó Harding en Instagram el sábado, anunciando su participación en la misión.
El contralmirante Mauger no quiso dar información sobre las personas a bordo «por respeto a las familias» y se limitó a decir que, según el operador, había un piloto y otras cuatro personas. Action Aviation no quiso hacer comentarios al respecto.
En las búsquedas se desplegaron dos aviones, un C-130 estadunidense y un P8 canadiense equipado con un sonar capaz de detectar submarinos, según los guardacostas. OceanGate Expeditions explicó en un comunicado que está «explorando y movilizando todas las opciones para traer de regreso a la tripulación en total seguridad».
En su página web, la compañía menciona que utiliza un sumergible llamado «Titán» para inmersiones a una profundidad máxima de 4 mil metros (13 mil 100 pies). Tiene una autonomía de 96 horas para una tripulación de cinco personas.
El «Titanic» partió del puerto inglés de Southampton el 10 de abril de 1912 en su viaje inaugural rumbo a Nueva York, pero naufragó después de chocar con un iceberg cinco días después. Casi mil 500 de los 2 mil 224 pasajeros y tripulantes a bordo perdieron la vida.
Los restos del transatlántico fueron descubiertos en 1985 a 650 kilómetros de la costa canadiense, a una profundidad de 4 mil metros en aguas internacionales del océano Atlántico. Desde entonces, la zona ha sido visitada por cazatesoros y turistas.
Sin haber estudiado la embarcación en sí, Alistair Greig, profesor de ingeniería marina en el University College London, planteó dos posibles teorías basadas en imágenes de la nave publicadas por la prensa. Señaló que si había tenido un problema eléctrico o de comunicaciones, podría haber salido a la superficie y estar flotando «esperando a ser encontrada».
«Otra posibilidad es que el casco a presión haya sido dañado, que haya habido una fuga», expresó en un comunicado. «Entonces el pronóstico no es bueno».
Si bien el sumergible puede estar intacto durante su inmersión, «hay muy pocas embarcaciones» capaces de llegar a la profundidad a la que podría haber llegado el «Titán».