Corea del Norte anunció este viernes que terminó la construcción de un nuevo «submarino nuclear táctico de ataque», un arma destinada a reforzar su fuerza naval, aunque el ejército surcoreano dijo que la embarcación podría no estar operativa.
Este nuevo submarino fue presentado durante una ceremonia presidida por el líder norcoreano Kim Jong-un, quien afirmó que la embarcación forma parte de la «evolución del arsenal nuclear de la marina», informó la agencia estatal norcoreana KCNA. Las imágenes difundidas por los medios estatales muestran a Kim, vestido con un traje ligero y un sombrero a juego, dirigiéndose a marineros en uniforme blanco junto al submarino, cuya proa está decorada con la bandera norcoreana.
El lanzamiento del submarino número 841, llamado «Hero Kim Kun Ok», marca «un nuevo capítulo en el fortalecimiento de las fuerzas navales» del país, según la agencia estatal. El líder norcoreano declaró que la nave «cumplirá su misión de combate» y será «uno de los principales medios ofensivos submarinos de las fuerzas navales» nacionales, según la misma fuente.
Corea del Norte transformará sus submarinos existentes en buques de combate equipados con armas nucleares, declaró. Durante la ceremonia con confeti y globos, el líder norcoreano mencionó el «plan estratégico y táctico para continuar fortaleciendo la modernización de las fuerzas submarinas y de superficie, así como el avance del armamento nuclear de la marina en el futuro», según KCNA.
Acompañado de militares vestidos con uniformes inmaculados y luciendo numerosas medallas, Kim inspeccionó el submarino que se estaba preparando para realizar una incursión de prueba. Según KCNA, insistió en «la necesidad» de equipar a los submarinos y otras embarcaciones de la marina «con armas nucleares tácticas». Sin embargo, el ejército surcoreano dijo que las afirmaciones de Pyongyang no deben ser tomadas al pie de la letra.
«Nuestra evaluación inicial es que [el submarino] no parece estar operativo», afirmaron los jefes de Estado Mayor Conjunto.
El aislado país ha realizado numerosas pruebas de armamento este año. En agosto, fracasó en su segundo intento de poner en órbita un satélite espía. En respuesta a estas pruebas, Corea del Sur y Estados Unidos fortalecieron su cooperación en defensa, llevando a cabo ejercicios militares conjuntos.
Según el centro de reflexión Iniciativa de Amenaza Nuclear, con sede en Estados Unidos, Corea del Norte dispone de una de las flotas de submarinos más importantes en el mundo, con entre 64 y 86 naves de este tipo. Sin embargo, los expertos dudan de que todos estén operativos debido a la edad de los buques. En 2019, los medios estatales mostraron a Kim Jong-un inspeccionando un submarino que nunca antes había sido visto.
«Se trata del mismo submarino, aunque profundamente modificado», estimó Joseph Dempsey, investigador del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos, en X.
Ankit Panda, analista que trabaja en Estados Unidos, agregó que las capacidades del nuevo submarino «no serán revolucionarias, pero aumentarán la complejidad de la amenaza nuclear planteada por Corea del Norte».
Corea del Sur condenó la construcción del submarino. Kim In-ae, vocero adjunto del Ministerio de Unificación de Corea del Sur, dijo que Pyongyang «está desperdiciando sus escasos recursos en el desarrollo inútil de armas mientras ignora las dificultades de vida de su pueblo».
«Pyongyang debe comprender que sus programas de armas y amenazas solo ponen en peligro su seguridad frente a la abrumadora respuesta de la posición conjunta reforzada de Corea del Sur, Estados Unidos y Japón», agregó.
Las relaciones entre las dos Coreas están en su punto más bajo en años, con las gestiones diplomáticas estancadas después de los intentos fallidos por discutir la desnuclearización de Pyongyang.