CANBERRA./
La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, se unió a cientos de personas en Christchurch este sábado para conmemorar el segundo aniversario del peor asesinato en masa del país.
Armado con armas semiautomáticas de alta capacidad, el australiano Brenton Tarrant mató a 51 personas e hirió a decenas más cuando abrió fuego contra fieles musulmanes en las dos mezquitas el 15 de marzo de 2019, transmitiendo en vivo los ataques en Facebook antes de ser arrestado.
Ardern dijo que el servicio, que incluyó discursos de sobrevivientes y familiares y amigos de los muertos, podría ayudar a curar las profundas heridas causadas por el ataque.
Si bien las palabras no pueden hacer milagros, tienen el poder de curar. Eso significa que debemos usarlos sabiamente”, comentó Ardern a los que estaban en el servicio en Christchurch.
Para nuestra comunidad musulmana eso significa usar nuestras voces y palabras para reconocer la pérdida que fue suya», agregó.
Tarrant fue condenado el año pasado a cadena perpetua sin libertad condicional, la primera vez que Nueva Zelanda confina a alguien por el resto de su vida.
