Una ciudadana sueca que se unió en Siria a la organización Estado Islámico (EI) fue condenada el viernes a seis años de prisión por haber dejado que su hijo se enrolara como niño soldado en el grupo yihadista.
La mujer, de 49 años, fue condenada por crímenes de guerra y violación del derecho internacional «al no haber impedido que su hijo, entre sus 12 y 15 años, fuera reclutado como niño soldado por el EI en el conflicto armado en Siria», señaló el tribunal de Estocolmo en un comunicado.
El adolescente, que se llamaba Joan, murió durante el conflicto en 2017, cuando tenía 16 años.
La madre «no actuó de forma adecuada para impedir» el reclutamiento, «ni quiso impedirlo. Ser niño soldado estaba dentro de sus convicciones», explicó el tribunal.
Es la primera vez que se juzga en esta país un caso de reclutamiento de niños soldado (por debajo de 15 años, según el derecho sueco).
La mayoría de suecos o residentes en Suecia que se unieron al EI (cerca de 300) no pudieron ser perseguidos por asociación con organización yihadista, ya que la ley sueca no previó este posible hasta después de la ola de salidas hacia Siria.
Por lo que apenas hay condenas, y suelen ser por otros crímenes.
La primera mujer condenada en Suecia tras ingresar en el EI lo fue en marzo de 2021, y por llevarse consigo a su hijo a Oriente Medio.