Cinthya Trinidad/
Xalapa, Ver. – El Centro Federal de Readaptación Social (CEFERESO), número 5 Oriente ubicado en el municipio de Villa Aldama, recibió una calificación de 6.2 dentro del Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria elaborado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
En 3 de los 5 rubros que se califican, este centro mostró tendencias a la baja, lo cual demuestra que el gobierno federal, del que es dependiente, ha descuidado el funcionamiento del lugar.
De manera detallada se indica que el rubro que garantiza la integridad de las personas privadas de su libertad y las condiciones de gobernabilidad, van en mejoramiento, no así en los de estancia digna, reinserción social de los internos y las necesidades específicas de los grupos de reos.
Durante la supervisión, la CNDH subrayó los temas importantes a los que el Gobierno Federal debe prestar atención:
Dentro de los aspectos que garantizan la integridad de las personas privadas de la libertad se detectó: insuficiencia de vías para la remisión de quejas de probables violaciones de derechos humanos, deficiencias de los servicios de salud, y de quienes se encuentran en aislamiento.
Mientras que en aspectos que garantizan una instancia digna: sus condiciones de materiales e higiene de instalaciones, en talleres o áreas deportivas, insuficiencia de instalaciones necesarias para su funcionamiento y en alimentación.
Es de mencionar que dentro de este rubro, recientemente este centro recibió una recomendación dirigida al titular del Órgano Administrativo Desconcentrado Prevención y Readaptación Social de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, por la inadecuada atención y cuidados otorgados a una persona privada de la libertad quien perdió la vida.
En cuanto a las observaciones de gobernabilidad, se señala insuficiencia de personal de custodia y seguridad, y de procedimientos para la imposición de sanciones disciplinarias.
Se observó también la falta de actividades laborales y de capacitación, educativas, deportivas, una inadecuada vinculación entre personas privadas de la libertad y deficiencias de separación entre procesados y sentenciados.
Además se señala las deficiencias en la atención a grupos con necesidades específicas, entre ellos adultos mayores, indígenas, con VIH SIDA y población LGBTTIQ.
Dentro de las observaciones apropiadas, destacan los temas: distribución de interinos, número de personas en relación a la capacidad, supervisión del titular del centro; materiales e higiene de instalaciones del área médica; ausencia de funciones de autoridad de internos, capacitación de personal Penitenciario, inexistencia de cobros, normatividad, clasificación de reos, integración y funcionamiento de comité técnico.
Para finalizar se observó el número de la población penitenciaria, de los 3 mil 126 internos con los que cuenta de capacidad, hay actualmente mil 572, lo indica se encuentra por encima del 50%.