Una corte de apelaciones de Florida confirmó un fallo según el cual una chica de 16 años no es lo «suficientemente madura» para tener un aborto; una decisión que desató la ira de legisladores estadounidenses.
Dos meses después de que la Suprema Corte revocara el acceso a la interrupción del embarazo en todo el país, el caso de la adolescente está provocando una nueva irritación alrededor de los derechos de las mujeres en Estados Unidos.
La chica, que no ha sido identificada, le dijo a una corte inferior que «no estaba lista para tener un bebé», que estaba todavía en el colegio, que no tenía trabajo y que el padre de la criatura no podía ayudarla.
Las menores que quieran abortar en Florida necesitan el consentimiento de al menos uno de sus progenitores. Sin embargo, la chica no tiene a sus padres, vive con un familiar y tiene un tutor designado, según mostraron los documentos.
La menor buscaba una excepción a esa norma, pero el tribunal inferior decidió que ella «no estableció mediante evidencia clara y convincente ser lo suficientemente madura para decidir sobre la interrupción de su embarazo».
El lunes, la corte de apelación estatal ratificó esa decisión, desatando la ira de congresistas.
Si estás furiosa porque una corte está forzando a una adolescente a llevar su embarazo a término tras el fallo que dice que no es suficientemente ‘madura’ para tener un aborto, no estás sola. Es aberrante», escribió en Twitter la congresista Pramila Jayapal, quien ha hablado abiertamente de su propio aborto.
Lois Frankel, una congresista de Florida, calificó la decisión como «inaceptable» y añadió que «es un ejemplo peligroso y horroroso de la guerra de Florida contra las mujeres».
¿En qué mundo una chica de 16 años es demasiado inmadura para recibir un aborto pero suficientemente madura para comprometerse a tener y criar a un hijo?», preguntó la demócrata Joyce Beatty en un tuit.
La chica dijo en la corte que a las 10 semanas de embarazo su tutor había dado el consentimiento para el aborto, pero al parecer no lo hizo por escrito, según los documentos.
Luego de que en junio la Suprema Corte derribó el derecho al aborto a nivel nacional y dejara en manos de cada estado la decisión, Florida cambió sus leyes para prohibir el procedimiento después de las 15 semanas, y no 24 como antes.
Otros estados liderados por republicanos en el sur estadounidense como Luisiana, Misisipi, Alabama y Georgia, han prohibido casi por completo la práctica o reducido su margen hasta las seis semanas.