El pasado fin de semana la noticia de la muerte de Proteo, perro rescatista de la Secretaría de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), cimbró a todo México, por la noble labor que desarrollaba en Turquía.
Después de varios videos, fotografías y homenajes, surgieron las dudas sobre cuáles habían sido las causas de la muerte del lomito, sin que se haya hecho público un comunicado al respecto.
Ante tanta especulación, su entrenador, Carlos Villeda Máquez, elemento activo del ejército mexicano, explicó que Proteo no había muerto por un derrumbe como se había especulado en diversos medios y redes sociales.
Villeda detalló que diversos factores propiciaron el lamentable deceso del perro de raza pastor alemán, uno de ellos fue el clima frío extremo que actualmente prevalece en Turquía, a eso se sumó el largo viaje de México a la zona del desastre y por último la avanzada edad del can.
La causa de su muerte no fue por un derrumbe, las condiciones climatológicas prevalecientes en ese país, así como su edad contó mucho y el viaje que sin duda fue bastante largo para él”, explicó Villeda Máquez.
El elemento de las fuerzas armadas, resaltó el trabajo de Proteo en diversas emergencias tanto en México como en otros países, como en Guatemala en 2015 donde fue parte de una misión de ayuda humanitaria por un deslizamiento de tierra, de igual forma lo hizo en Ecuador en 2016 cuando un sismo de magnitud 7.8 azotó ese país y en Haití en 2021 donde fue parte en las tareas de rescate luego de que un sismo se registra en esa región.
Me siento muy orgulloso de mi can, especialmente que sea reconocido como un gran perro. Y no nada más me siento orgulloso de él, sino de todos los que han venido aquí y están cumpliendo con su trabajo, quisiera que así sean reconocidos”, señaló el soldado.
Cabe señalar que debido a su alto grado de adiestramiento alcanzado y su experiencia en actividades de búsqueda y rescate de personas, es que el can fue seleccionado para apoyar en esta misión por tierras turcas.
Proteo, nació el 16 de junio de 2013 y formó parte de la Primera Brigada de Policía Militar, localizada en el Campo Militar Número 1-A, de la Ciudad de México. Tenía 9 años y 7 meses de edad en el momento de su fallecimiento.