El uso de la Dexametasona debe realizarse solo como tratamiento en pacientes graves con Covid-19, ya que en etapas tempranas puede resultar contraproducente, advirtió el doctor Francisco Kuri Breña, coordinador de Productos Biotecnológicos de la Farmacopea Mexicana.
Entrevistado por Pascal Beltrán en “Imagen MultiCast”, explicó que especialistas de la Universidad de Oxford, realizaron un estudio en el que participaron 2 mil personas, que demostró que la Dexametasona es un efectivo reductor de mortandad en pacientes con Covid-19.
El medicamento, que se puede conseguir en cualquier farmacia, redujo el número de muertes en un tercio, cuando se trató de pacientes con ventiladores.
En personas que solo necesitan recibir oxígeno, la Dexametasona redujo muertes a una quinta parte.
Pero en pacientes en etapa temprana, el beneficio fue nulo, por lo que el doctor Kuri Breña, precisó que el medicamento es un corticosteroide, es decir, es similar a una hormona natural producida por las glándulas suprarrenales.
Por lo general, se usa para reemplazar este producto químico cuando su cuerpo no fabrica suficiente.
El fármaco alivia la inflamación (hinchazón, calor, enrojecimiento y dolor) y se usa para tratar ciertas formas de artritis; trastornos de la piel, la sangre, el riñón, los ojos, la tiroides y los intestinos (por ejemplo, colitis).
También se usa para tratar alergias severas y asma. La Dexametasona también se utiliza para tratar ciertos tipos de cáncer.
