Batman es uno de los personajes de DC con mayores adaptaciones en el cine, una de ellas es Batman & Robin, película de Joel Schumacher en la que George Clooney porta por primera -y única- vez el traje del superhéroe luego de la renuncia de Val Kilmer por diferencias con el director. Además de El Hombre Murciélago, la cinta vuelve a retomar su relación con Robin, interpretado por Chris O’Donnell, quien vio su carrera apagarse de la noche a la mañana.
Sin embargo, el filme no tuvo el éxito esperado y sumó pésimas críticas. La mala recepción de Batman y Robin, terminó afectando a Chris O’Donnell que pese a protagonizar reconocidas películas su rostro prácticamente desapareció de la industria cinematográfica e, incluso, tuvo que iniciar un nuevo negocio.
Sin duda, la historia de Chris O’Donnell es un ejemplo de que el éxito en Hollywood no es nada sencillo; en ocasiones aceptar un proyecto en el cine o la televisión puede significar el fin de una carrera o el primer paso para convertirse en una estrella.
Qué pasó con Chris O’Donnell, el Robin de 1997
El mismo actor admitió el fracaso de Batman y Robin después del estreno de la cinta (1997) -en la que Arnold Schwarzenegger interpretó al villano Capitán Frío y Uma Thurman a Poison Ivy-: una película que fue pensada «para vender muñequitos» -como algunas otras-.
Chris O’Donnell comenzó en la industria grabando anuncios publicitarios, entre ellos una campaña de McDonald’s junto a Michael Jordan. Poco después llegaría su primer oportunidad en el cine con Los hombres nunca se van (1990).
Aunque su saltó a la fama fue gracias a la cinta Tomates verdes fritos, del director Jon Avnet. Posteriormente protagonizó reconocidas películas como Perfume de mujer, The Bachelor, Batman Forever y Límite vertical.
Aceptar el papel en Batman & Robin, lo llevó a renunciar al personaje principal en Titanic, esto sin olvidar que rechazó otra llamativa propuesta: interpretar a uno de los Hombres de negro.
El talento culinario de Chris O’Donnell
Con la estrepitosa caída de Batman & Robin, el actor fue desapareciendo de la pantalla grande y tuvo que llevar su talento a la televisión. Fue así que participó en las series Grey’s Anatomy, NCIS: Los Ángeles y Two and a Half Men.
Continúa realizando de manera espontánea algunos proyectos en la pantalla chica, lo cual le da tiempo libre para atender su propia pizzería. Actualmente, Chris O’Donnell tiene 51 años, está casado con Caroline Fentress y tiene cinco hijos.