Comenzó el jueves el juicio a un grupo de 24 voluntarios que participaron de operaciones de búsqueda y rescate de migrantes en la isla griega de Lesbos bajo cargos derivados de contrabando, un caso que ha recibido fuertes críticas de grupos internacionales defensores de los derechos humanos.
Entre los voluntarios griegos e internacionales se encuentran la nadadora competitiva Sara Mardini, nacida en Siria, cuya hermana Ysra Mardini fue miembro del equipo de natación de refugiados que participó en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en 2016 y de Tokio este año.
Los voluntarios varios de los cuales sufrieron varios meses de prisión preventiva deben responder a una serie de cargos que incluyen delitos derivados del espionaje, acceso ilegal a comunicaciones estatales y facilitar actividades delictivas.
Ellos sostienen que sólo querían salvar vidas cuando la isla de Lesbos fue inundada por una ola de refugiados y migrantes que arribaban desde la vecina Turquía.
Human Rights Watch, Amnistía Internacional y otros grupos promotores de los derechos humanos sostienen que se deben desestimar los cargos.
Los cargos distorsionan de manera perversa las operaciones de búsqueda y rescate del grupo, como si fueran una banda de contrabandistas», dijo Human Rights Watch en un comunicado antes del juicio.
Más de un millón de migrantes y refugiados, muchos de los cuales huían de la guerra en Siria, llegaron a Lesbos y otras islas griegas desde Turquía en 2015-16. La mayoría se trasladaron a Alemania y otros países de la Unión Europea.
El gobierno griego ha endurecido la represión de la migración ilegal e irregular en los últimos años. Intercepta botes en el mar y ha erigido un muro de acero en su frontera terrestre con Turquía.
Niega las frecuentes acusaciones de los grupos defensores de los migrantes de que realiza deportaciones sumarias, llamadas también regresos forzados.