El canciller austriaco Alexander Schallenberg anunció el viernes que espera obtener el domingo el visto bueno del Parlamento para un confinamiento de todos los ciudadanos que no se hayan vacunado contra el covid, en un momento en que el país vive un aumento de los contagios.
El objetivo es claro: el domingo queremos dar el visto bueno a un confinamiento nacional para los no vacunados», dijo Schallenberg en una rueda de prensa, sin detallar cuándo entraría el vigor esta medida.
Los estados de Alta Austria y Salzburgo, que tienen las peores cifras de contagios, ya han comenzado a aplicar confinamientos desde el lunes.
Para que la medida pueda ser aplicada a nivel nacional, debe ser aprobada por el Parlamento y por los responsables de los gobiernos regionales durante el fin de semana.
El ministro de Salud, Wolfgang Mueckstein, anunció además este viernes que decretará la vacunación obligatoria para los trabajadores del sector sanitario.
Cerca del 64% de los austríacos están vacunados por completo, un porcentaje levemente inferior a la medida de la Unión Europea (67%).
Schallenberg calificó a la tasa de vacunación de «lamentablemente baja».
Austria, país de 9,8 millones de habitantes, registró más de 11.640 muertos de covid desde el inicio de la pandemia.