Un belga se impuso como el nuevo «rey» del «mullet», el icónico e improbable corte de pelo de los años 1980, en un insólito campeonato europeo que se celebró en Francia.
Venerado o ridiculizado, el corte de pelo «mullet» –corto por delante, largo en la zona de la nuca– es más que un peinado para las 500 personas que asistieron el sábado al festival en Chéniers, un pueblo del centro de Francia.
Es un estilo de vida, el poder reírse de uno mismo», dijo Hubert, que viajó desde Bélgica, donde hace dos años se celebró el primer Campeonato Europeo de «mullet».
Los asistentes hicieron alarde de sus peinados o hicieron cola para que estilistas profesionales les cortaran el pelo.
Los organizadores dijeron que la multitud habría sido mayor si no fuera por los límites para las reuniones públicas impuestas por la pandemia de covid-19.
Y, al menos en el caso de los hombres, parece que el «mullet» queda mejor con unas patillas prominentes, una barba larga o, al menos, un bigote.
La pandemia puede incluso haber dado un impulso a este corte, ya que la gente de todo el mundo aprovechó el confinamiento para probar nuevos estilos.
Alrededor de 100 personas compitieron por la corona que ganó Nicolas Vanderkelen, un camionero belga que dijo llevar este corte desde hace 20 años.
El corte de pelo «mullet» vivió su época dorada en los años 1980, antes de ser considerado la antítesis de la elegancia.
Cantantes populares como Rihanna y Miley Cyrus, así como un sorprendente número de jugadores de la selección inglesa de rugby, han contribuido a dar una nueva vida a este corte, que consiste en dejarse la parte delantera muy corta, desde el flequillo hasta la parte superior del cráneo, y la de atrás, larga, incluso con greñas.
