CIUDAD DE MÉXICO/
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda el consumo máximo de 5 gramos diarios de sodio en adultos, sin embargo, se estima que la población mexicana consume más del triple, por lo que nuestra salud se deteriora con más rapidez.
El incremento de las enfermedades crónicas y la obesidad en la población en los últimos años, ha captado nuestra atención para darnos cuenta de que tan importante es cuidarnos a través de los alimentos.
Por otro lado, el consumo excesivo de sal, grasas saturadas y grasas trans – que se encuentran en los alimentos que diariamente consumimos – son factor de riesgo para el incremento de dichos problemas en la población.
Es bien sabido que debido a la falta de tiempo y la vida tan saturada que llegamos a tener, no nos damos el espacio y el tiempo de podernos preparar alimentos saludables y acudimos a los servicios que nos ofrecen los alimentos rápidos, pero que no aportan a nuestra adecuada alimentación.
3 RECOMENDACIONES PARA REDUCIR EL CONSUMO DE SAL EN LAS COMIDAS
Para los adultos: la OMS recomienda consumir menos de 5 gramos (un poco menos que una cuchara de té) de sal por día, dice la OMS
Para los niños: la OMS recomienda ajustar a la baja, para los niños de 2 a 15 años, la ingesta máxima recomendada para los adultos en función de las necesidades energéticas en relación con las de los adultos. Esta recomendación no comprende el periodo de lactancia natural exclusiva (de 0 a 6 meses), ni el de alimentación complementaria de la lactancia natural (de 6 a 24 meses)
Toda la sal que se consume debe ser yodada, es decir «enriquecida» con yodo, lo cual es esencial para un desarrollo sano del cerebro del feto y del niño pequeño así como para optimizar las funciones mentales en general.