Washington./ Una cerveza, un pastel, flores y hasta dinero. En Estados Unidos se multiplican las iniciativas para convencer a los indecisos de que se vacunen contra el covid-19.
Cerca del 56% de los adultos del país, o más de 145 millones de personas, han recibido al menos una inyección.
Pero la cantidad diaria de dosis administradas cada día está disminuyendo y las autoridades quieren convencer a los indiferentes o escépticos de que se vacunen.
El presidente estadounidense, Joe Biden, inició el martes una «nueva fase» de inmunización con el objetivo de al menos una inyección para el 70% de los adultos y 160 millones de estadounidenses completamente inmunizados para el feriado nacional del 4 de julio.
Para lograr este objetivo, anunció alianzas con supermercados para garantizar promociones a los compradores que vayan a vacunarse.
Estas reducciones van desde 5 dólares por compra hasta el 10% de la compra, dijo el miércoles Andy Slavitt, asesor de la Casa Blanca en la lucha contra el covid-19.
Algunas grandes ligas deportivas también ofrecen entradas gratis o descuentos en las tiendas, dijo.
Los fanáticos del béisbol que se vacunen en el estadio de los Yankees o de los Mets de Nueva York el día del partido recibirán un pase gratis, anunció el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo.
Y para llegar a un centro de vacunación, las plataformas Uber y Lyft VTC prometen viajes sin costo o a precio reducido.
Las tiendas de suplementos nutricionales Vitamin Shoppe ofrecen a los clientes que muestren su tarjeta de vacunación.
Y para aquellos que aman el dulce, la cadena Krispy Kreme promete una dona gratis por día hasta fin de año para los que se vacunen.
Para convencer a los indecisos, la marca llega a ofrecer todos los lunes hasta finales de mayo un café y una tarta gratis «para empezar bien la semana», además de elegir la vacuna deseada.
Los estados también quieren hacer cambiar de opinión a los que no se quieren vacunar con la bebida alcohólica favorita de los estadounidenses.
El gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, ha prometido una cerveza gratis hasta fin de mes a cualquier persona mayor de 21 años, la edad mínima para consumir alcohol, que reciba una primera dosis de la vacuna.
La alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, anunció una cerveza gratis a cambio de ponerse la vacuna monodosis de Johnson & Johnson. Pero la promoción se limita a unas pocas horas el jueves y en un solo centro de vacunación.
Prioridad a los jóvenes
En anticipación al Día de la Madre, que se celebra el domingo en Estados Unidos, las autoridades municipales de Washington ofrecerán el día anterior 300 ramos de flores a los que se vacunen. Incluso pueden hacerse un tatuaje efímero de «Vacunado para mamá» hasta fin de mes.
En un país donde los trabajadores están lejos de tener vacaciones pagadas, más de 1.000 empresas garantizan a sus empleados períodos de descanso remunerados para vacunarse, dijo Slavitt.
A fines de abril, la administración de Biden anunció créditos fiscales para las pequeñas y medianas empresas que otorguen permisos pagados a sus empleados para que reciban su inyección y recuperarse de posibles efectos secundarios.
Aplicación de vacunas en EU / Foto: AFP
Pero la mejor motivación es el dinero
El gobernador de Maryland, Larry Hogan, anunció el lunes que los empleados estatales recibirían 100 dólares si se vacunan, una oferta válida por los próximos 18 meses.
Este tipo de incentivo es otra forma de enfatizar la importancia de vacunarse», dijo Hogan, alentando a las empresas a hacer lo mismo para convencer a sus empleados.
En Virginia Occidental, donde la vacunación está abierta a partir de los 16 años, el gobernador Jim Justice ofrece 100 dólares en bonos de ahorro a los jóvenes de 16 a 35 años, el grupo etario más reacio a vacunarse. «Es imperativo que nuestros jóvenes se vacunen», dijo la semana pasada. «Aunque no se enfermen, pueden infectar a otros».
Según una encuesta realizada en marzo por la Kaiser Family Foundation, el 25% de los jóvenes de 18 a 29 años prefieren «esperar» antes de vacunarse, en comparación con el 17% de la población total. Solo el 13% de los encuestados indicaron que se negaron a recibir una vacuna.